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Otra forma de practicar el ecologismo y hacerlo parte de la vida es mediante una dieta sostenible y agradable para el medioambiente.
¿Cómo puede ser posible? Con practicas planificadas, sobre todo en la elección de los alimentos diarios.
Muchas personas alrededor del mundo a diario buscan salidas favorables para proteger el planeta y algunos se han dedicado a evaluar la forma de beneficiarlo desde los productos que consumimos para alimentarnos.
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Por lo que, es importante analizar las porciones que se consumen, entre alimentos de origen animal y vegetal, así como el agua u otras bebidas embotelladas, alimentos procesados, y los que necesitan grandes cantidades de plásticos para ser distribuidos, son determinantes para una dieta sostenible.
Consejos para lograr una dieta sostenible
1.Comer menos carnes rojas y procesadas. Procurar un balance entre otras comidas y obtener la proteína animal de forma variada, esto por la matanza de animales.
2.Consumir más productos locales, de temporada y mínimamente procesados. Apoyar lo que se produce de forma local es esencial.
3.Aumentar el consumo de leguminosas y de frutos secos como fuente de proteína vegetal. Apoyarse desde los expertos de nutrición para consumir diferentes alimentos vegetales para nutrirse de forma correcta, consumiendo la cantidad de proteína necesaria para cada día.
4.Incrementar el consumo de frutas y hortalizas. Esto, sin duda que no solo beneficia al planeta, sino al mismo cuerpo, pues los nutrientes de la madre naturaleza benefician la salud.
5.Tomar más cereales y alimentos ricos en almidón. Variar la alimentación e incluir diferentes productos como cereales, legumbres, es una opción ecologista.
6.Mantener el consumo de lácteos. Los derivados de la leche contienen vitaminas, son fuentes de proteína y se pueden producir de forma extensa.
7.Planificar las comidas o aprovechar las sobras contribuye al cambio para evitar el despilfarro. Esta práctica funciona para economizar y no desperdiciar alimentos, que han sido producidos en la tierra.
