Los niños en edad escolar deben comenzar a cuidar el medioambiente no solo desde casa, sino también en sus centros educativos, con la debida enseñanza de los maestros encargados de su formación académica.
Los centros de estudio que piensan en el medioambiente se vuelven más sostenibles y reducen su gasto, a la vez que los alumnos adquieren valores ecológicos.
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Por lo que, la mejora de la gestión de materiales, el reciclaje de los residuos o la asunción de hábitos de consumo ecológico que eviten el derroche de la energía, el agua o los alimentos son una inversión con la que todos ganan.
Algunos ambientalistas han brindado consejos que se pueden implementar desde las escuelas y colegios:
1.Implantar una agenda verde escolar
Los temas que se pueden tocar son muy diversos, como la biodiversidad, el cambio climático, la contaminación, los hábitos de consumo, las energías renovables o la movilidad. Las escuelas tienen que integrarla dentro de su sistema organizativo.
2. Cultivar un huerto urbano
Los huertos escolares transmiten valores educativos y ambientales a los estudiantes y, de paso, producen alimentos sanos. Cada vez más colegios y escuelas se animan a poner en marcha uno.
3.Utilizar material escolar ecológico
Las principales marcas comerciales de material escolar ofrecen cada vez más productos "ecológicos" o con la sostenibilidad interiorizada en su proceso: papel o lápices de madera certificada con el sello FSC, bolígrafos con materiales reciclados o recargables, acuarelas con materiales naturales, entre otros.
4. Concienciar sobre las tres erres (R)
La labor de concienciación debe ser constante, diaria, con paciencia, repitiendo los mensajes las veces que haga falta. Reducir (usar solo lo necesario, no derrochar recursos básicos como agua, electricidad o alimentos).
Reutilizar (aprovechar al máximo los productos, darles una nueva vida, compartir); y reciclar (llevar los productos usados a los contenedores adecuados para sacar partido a sus materiales).
5. Promover la educación y la diversión ambiental
El medio ambiente debería estar presente de modo transversal en todos los materiales educativos.
Además de dar a conocer de manera explícita contenidos como la biodiversidad, la sostenibilidad o la naturaleza, se podrían fomentar comportamientos ecológicos.
Este es un artículo de la versión impresa de tunota. Lea más noticias relacionadas
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