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Ana María Calderón Boy es la exvocera interina de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH) y habló en exclusiva con tunota.com.
Se refirió a la lucha contra la corrupción en el país, los grandes desafíos y los avances que se iniciaron de manera más visible con las actuaciones del binomio UFECIC/MACCIH.
Dice que no se lograron todos los cambios, porque tuvo escollos que obstaculizaron o impidieron el éxito, como el Congreso Nacional, el Poder Ejecutivo y la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Sin embargo, está convencida de que Honduras debe continuar la lucha contra ese flagelo que se traduce en más pobreza.
Estados Unidos hace esfuerzos señalando a los corruptos hondureños y sancionándolos. El Gobierno hondureño, además de una CICIH, ¿a qué está obligado?
Se requieren dos respuestas firmes y coherentes: la respuesta nacional y la internacional. No solamente Estados Unidos, sino la comunidad internacional, está
demostrando firmeza en apoyar la lucha contra la corrupción en Honduras; pero, el actor más importante es el país y debe enfocar sus esfuerzos en varias líneas de acción.
Es esencial que la respuesta nacional sea coherente con el discurso anticorrupción. Para garantizarlo, es necesario verificar primero si hay verdadera voluntad política, compromiso del Estado y sus instituciones en la lucha contra la corrupción.
Evaluar si las instituciones que están vinculadas a la prevención y combate contra la corrupción son eficaces. Por último, constatar si existen realmente políticas públicas dirigidas a la prevención y combate contra la corrupción, a fomentar la transparencia y la rendición de cuentas.
¿Qué pasa con los diputados que no derogan leyes que blindan a altos funcionarios y más bien aprueban amnistías para funcionarios de la administración Zelaya?
El Congreso Nacional, lamentablemente, tiene una historia de corrupción y blindaje de las élites corruptas que lo convirtió en parte de esta estructura de corrupción sistémica.
Entonces, las nuevas fuerzas políticas necesitan ser coherentes con el discurso de cambio y desmontaje de los pactos de impunidad. He visto que se han emitido algunas leyes para fortalecer, por ejemplo, a UFERCO, pero si los fiscales no tienen normas e instrumentos procesales eficaces para investigar y. por el contrario, hay pactos de impunidad que los limitan o que fomentan la impunidad, si los jueces aún no tienen
una jurisprudencia uniforme en materia de corrupción, entonces, poco eficaces serán las normas que el Congreso está aprobando.
¿Cuál debe ser el camino para una verdadera lucha anticorrupción en Honduras?
El primer paso es el compromiso del Gobierno y de las instituciones con el combate frontal contra la corrupción, caiga quien caiga. Esto implica adoptar medidas de transparencia y el fortalecimiento de la rendición de cuentas.
Es fundamental que las instituciones que se encargan de la prevención y el combate de la corrupción sean robustas. Es necesaria la participación firme de la sociedad civil, academia, prensa y empresas.
Es necesario proveer un marco normativo anticorrupción: normas penales y procesales penales. Es indispensable que se dote a los operadores de justicia de herramientas procesales modernas y exitosas en otros países, como la ley de colaboración eficaz.
Esta normatividad no solo debe centrarse en la interdicción o combate a la corrupción, sino también en medidas de prevención, así como la prohibición del nepotismo.
Por último, deben considerarse la promulgación de leyes de compromiso ético de las empresas, pues recordemos que la corrupción también existe en el ámbito privado.
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¿Incidirá la medida de Estados Unidos en Centroamérica de condicionar la ayuda a estos países si no combaten la corrupción y la impunidad?
Es una medida necesaria para comprobar que existe una verdadera voluntad política de prevenir, combatir la corrupción y tener la garantía de que toda la ayuda económica llegará a los más necesitados y que será utilizada para los fines que se entregan.
Si existe corrupción, el dinero que se recibe con fines benéficos podría ser destinado para uso particular. Esta exigencia es parte de la diligencia debida, mediante la cual se requiere un examen minucioso de los beneficiarios potenciales de préstamos para detectar cualquier evidencia de corrupción.
Quiero recordar en este punto que en el caso del binomio UFECIC/MACCIH, conocido como “Corrupción sobre ruedas”, evidenció que los fondos del programa presidencial de reducción de la pobreza Bono 10 Mil, financiado por el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), fueron utilizados en campañas políticas y en beneficio de familiares de ciertos políticos y funcionarios públicos.
¿Qué espera del proceso de elección de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia y del fiscal general en Honduras para haya sintonía con un verdadero combate a la corrupción?
La elección de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia y del fiscal general es fundamental para cualquier esfuerzo anticorrupción. Ambas son instancias claves para que se dicten las políticas públicas eficaces para la persecución penal de los delitos de corrupción, que se fortalezca el circuito anticorrupción existente y que pueda combatirse la impunidad. Por ello, el proceso de selección debe realizarse siguiendo los estándares internacionales para la selección de magistrados.
Honduras adquirió compromisos internacionalmente cuando se adhirió y ratificó los instrumentos internacionales, en especial las convenciones que protegen los derechos humanos.
Honduras está obligada a adoptar medidas concretas que garanticen la independencia, imparcialidad, objetividad, capacidad e idoneidad de los jueces y fiscales.
Tras la experiencia de la MACCIH ¿Qué pasará con la instalación de la Comisión Internacional Contra la Corrupción en Honduras?
Una nueva comisión internacional contra la corrupción debe tener como eje principal el fortalecimiento de las instituciones que integran el sistema anticorrupción. Así podrá colaborar tanto en la prevención como en el combate de la corrupción.
Una comisión internacional no debería suplir a las instituciones, sino robustecer su trabajo, pues su naturaleza es transitoria y lo más adecuado es dejar capacidades instaladas en los actores nacionales.
La MACCIH implementó un nuevo modelo de investigación, la Investigación y Persecución Penal Integrada. A través de esta modalidad de investigación, la MACCIH trabajó de manera conjunta, mediante la colaboración activa del Ministerio Público, específicamente con la UFECIC, en dos etapas: a) En las investigaciones de casos de redes de corrupción, incluido el ejercicio de la acción penal o acusación; y b) En la etapa de juzgamiento.
Esta modalidad de investigación permitió la creación de los Equipos de Investigación y Persecución Penal Integrada UFECIC-MP/MACCIH-OEA, compuestos por los fiscales e
investigadores de UFECIC y los expertos internacionales de la MACCIH (fiscales internacionales, investigadores, analistas y otros especialistas internacionales).
Considero que este es un buen legado que dejó la MACCIH, pues significó el traspaso de experiencias y buenas prácticas.
¿Cuáles son las herramientas que no deben faltarle a la CICIH?
Esencialmente, un marco normativo idóneo para el cumplimiento de su mandato; el apoyo de la sociedad civil y de la comunidad internacional.
¿Estaba comprometida la MACCIH con el Gobierno o algún grupo de poder?
Fui vocera interina de la MACCIH en los tiempos más difíciles de la misión y puedo decir con total seguridad que no existió ningún compromiso con nadie.
Realizamos un trabajo técnico de acompañamiento, asesoramiento y colaboración y los casos se investigaron de manera independiente, sin sesgo de ningún tipo ni mucho menos presión.
Tampoco sustituyó a las instituciones. La modalidad de trabajo que implementó la MACCIH para investigar grandes casos de corrupción fue mediante equipos integrados. En todos los casos, los fiscales de UFECIC eran quienes dirigían las investigaciones y tenían siempre la custodia de las pruebas. Los expertos internacionales de la MACCIH proveían asistencia técnica y traspaso de capacidades, pues el objetivo fue dejar capacidades instaladas en las personas.
La independencia de la MACCIH se evidenció en los 14 casos que presentó el binomio UFECIC/MACCIH y que tuvieron un impacto importante en la lucha contra la corrupción y la impunidad, generando temor en las altas esferas del poder que exigieron su desaparición.
No me queda duda que la visibilización de las modalidades de corrupción incomodó a más de uno cuando se evidenció, por ejemplo, el desvío de dinero público para campañas políticas o la existencia de vínculos entre el narcotráfico y altos funcionarios públicos.
¿Qué tan independiente puede llegar a ser la CICIH?
Una misión anticorrupción tiene que ser totalmente independiente, de naturaleza técnica y no debe sustituir a las instituciones nacionales.
¿Cuánto tiempo cree que sería prudente para que la CICIH brinde resultados?
No creo que sea prudente dar tiempos exactos, pues depende de la estructura y el mandato que tenga la CICIH, pero es posible que la instalación y selección del equipo que la conformará tome por lo menos un año.
Teniendo en cuenta que están funcionando los juzgados anticorrupción y que la MACCIH dejó en UFERCO varias líneas de investigación de grandes casos de corrupción, pienso que la CICIH podría iniciar el acompañamiento y asesoría técnica a los 6 u 8 meses si ya tiene el equipo de expertos que colaborarán con las investigaciones.
Los resultados no solo dependerán de la CICIH, sino también del compromiso del Ministerio Público y del Poder Judicial.
¿Qué tanto se puede avanzar en el proceso de investigación contra la corrupción en un período de cuatro años?
Las investigaciones por corrupción requieren de tiempo y depende de la complejidad tanto por los hechos que se investigan como por la cantidad de investigados.
Pero, por otro lado, debemos tener en cuenta que existen plazos procesales para la investigación y juzgamiento y la obligación de respetar la garantía judicial del plazo razonable.
Por ello hablar de cuatro años es demasiado. Si se realiza una investigación siguiendo buenas prácticas, es posible que se pueda lograr una condena en poco más de un año, como sucedió con el caso “Caja Chica de la Dama”.
¿Cuáles son los desafíos más grandes que podría enfrentar la CICIH, de acuerdo con su experiencia?
Que tenga un mandato bien delimitado, pues de lo contrario podría debilitar sus actuaciones en asuntos que no están relacionados al combate contra la corrupción.
Otro desafío sería la existencia de pactos de impunidad y de instituciones o poderes del Estado que no tengan verdadera voluntad política, pues para un óptimo desempeño, la CICIH requiere la adecuada y fluida coordinación con los organismos estatales.
Otro gran desafío es la coherencia de la comunidad internacional, pues no debemos olvidar que la CICIG y la MACCIH tuvieron que enfrentar el poco interés del Gobierno de Donald Trump, que incluso ofreció poca resistencia cuando desmantelaron la CICIG en Guatemala; pero por otro lado, contaron con el apoyo del Congreso de los Estados Unidos.
