Esto, luego que al menos 41 personas fallecieron y otras siete resultaron heridas en una reyerta y un incendio registrados a tempranas horas de este día en un módulo de la PNFAS.
En ese sentido, los equipos de especialistas forenses del MP practicarán para el reconocimiento de las víctimas (identificación humana), se auxiliarán de pruebas de necrodactiloscopia (huellas).
Asimismo, una autopista oral (estudios odontológicos que revelarán estimación de edad, sexo, entre otros) e investigación de comparación genética (para los casos de quemaduras graves o carbonación).
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Una vez que los cuerpos sean trasladados al servicio de morgue de Tegucigalpa, los médicos y técnicos efectuarán las autopsias y harán las entregas a los familiares de los cadáveres plenamente identificados.
Los requisitos
Sin embargo, el MP solicitó comprensión a los familiares de las víctimas de la masacre en PNFAS, en cuanto a los términos de entrega en los casos que se requieran estudios de ADN.
Caso contrario, los parientes deberán de cumplir varios requisitos para poder reclamar los cuerpos de sus familiares en las instalaciones de Medicina Forense.
- Presentarse con original y copia de partida de nacimiento, Documento Nacional de Identificación (DNI) o pasaporte del fallecido.
- Portar original y copia del DNI del familiar directo que reclama el cuerpo (debe tener al menos un apellido igual que el fallecido).
- En caso de ser el esposo o compañero de hogar, presentar el acta de matrimonio o copia de la partida de nacimiento de los hijos que tuvieron en común.
- Llevar dos testigos con su respectiva DNI y copia de la misma.
- Llevar ataúd y sábana para retirar el cuerpo.
Masacre en Támara
41 mujeres murieron en una reyerta en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), que había dejado varios heridos.
De acuerdo a declaraciones de el portavoz del Ministerio Público, Yuri Mora, son al menos 25 las personas muertas carbonizadas; y 16 acribilladas dentro de las instalaciones del centro penitenciario, un total de 41 víctimas mortales.
Según información preliminar, fueron integrantes de la pandilla Barrio 18 las que ingresaron armadas con fusiles de asalto AR-15 y comenzaron a atacar a todas las del módulo I.