Por muchos años, Fernando Anduray se desempeñó como docente universitario en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), una faceta que dejó en 2016.

Se definió como un hombre con temperamento fuerte y con convicciones que, según él, lo han enemistado con diversos sectores. "Yo nunca he sido un hombre agradable para empresa privada", ejemplificó.

Y es que Anduray, de 65 años, aseveró ser un defensor del sistema democrático del Estado de Derecho, algo que, según cuenta, muchos empresarios en Honduras no respetan.

"Ellos (los empresarios) tienen que cumplir la ley, no es posible que continúen haciéndose ricos de forma ilegal", dijo.

De igual forma, es un reconocido militante del Partido Nacional de Honduras (PNH). Entre 1994 y 1998, fue diputado en el Congreso Nacional en representación del departamento de Francisco Morazán.

También fue precandidato presidencial durante las elecciones primarias de 2012 y, aunque en algún momento criticó al actual presidente Juan Orlando Hernández, aseguró que su gestión le ha dejado resultados positivos a Honduras.

Acostumbrado a realizar análisis políticos y jurídicos, Anduray conversó con En Primera Plana y expuso sus opiniones sobre diversos temas de cara a las elecciones generales. Entre ellos, habló de la candidatura de Nasry Asfura, de los resultados de la administración Hernández y de las últimas estrategias desarrolladas por la oposición.

Hablando del marco legal de las Zonas Especiales de Desarrollo (ZEDE)...

A mi parece que tiene que ser revisado, a simple vista hay situaciones que son incompatibles con la homogeneidad de la Constitución del República y con régimen de excepción que Hablando del marco legal de las ZEDE 

Si “Papi” es presidente, va a ser una revisión de toda esa situación, porque Honduras tiene que tener algunos beneficios directos en materia de pago de impuestos y régimen fiscal, hasta ahora eso no está claro. En lo particular, como nacionalista, creo que hay que hacerle algunos ajustes. 

¿Por qué hubo tanto tiempo después de la aprobación de la Ley Orgánica de las ZEDE para que iniciara a materializarse el proyecto? 

Estas cosas llevan su tiempo, las ZEDE son grandes inversiones de capitales extranjeros y los inversionistas no se convencen de la noche a la mañana, de las bondades del proyecto; tienen que tener la seguridad y la bondad que esto va a funcionar, además, creo que la inestabilidad política de Honduras durante muchos años no convirtió al país atractivo para las inversiones internacionales. 

Pasemos al tema del plan de gobierno de Nasry “Tito” Asfura ¿Qué es lo que más destaca de ese proyecto de gobierno? ¿Apoya que se continúe con el trabajo hecho o cree que hay cosas que se deben añadir o corregir? 

Hay cosas que Juan Orlando ha ejecutado fuertemente como los corredores logísticos, hay una infraestructura para comenzar a desarrollar el país, pero el tema de la administración del patrimonio del Estado “Tito” Asfura ha propuesto la descentralización administrativa del país a través de las municipalidades; como alcalde, conoce las dificultades con las que trabajan las alcaldías. 

Esa es una forma de luchar o desentrañar el sistema de corrupción pública a través de las licitaciones y de los grandes proyectos del Estado, porque aquí hay empresas que prácticamente están en el gobierno esperando a ver qué sale para hacer los trabajos. 

Mientras que, si descentralizan los proyectos a través de las municipalidades, se estarían viendo efectos positivos y se estarían atendiendo más las necesidades locales. Esto contribuiría a evitar la migración interna en el país. 


Fernando Anduray fue un duro crítico del presidente Juan Orlando Hernández, pero luego se convirtió en uno de sus principales defensores,Foto: Álex Gutiérrez / TED BrandStudio

El próximo Presidente tiene que abrirse para ser un gobierno de integración y de unidad nacional; definitivamente, el país no está para que un partido gobierne, sino para que los mejores hombres y mujeres lo hagan, pero sin el sectarismo político ni la influencia de los capitales sucios o de los sectores del crimen organizado que han estado tratando de capturar todo en Honduras. 

Todas las organizaciones de maras y pandillas, de narcotráfico y de lavado de activos se metieron en todo, desde las iglesias, sectores gremiales y las ONG. 

Las ONG, para sostenerse en Honduras, se convirtieron en azotes y verdugos de la sociedad, las que son financiadas desde el extranjero necesitan que haya justificación en el país de la razón de su existencia, como por ejemplo, los derechos humanos. 

Estas ONG viven de hacer grandes los problemas que se presentan en Honduras, convierten en violación de derechos humanos cuando no lo son, y los que son los convierten en grandes monstruos, se declaran heridos, perseguidos por el gobierno para que les manden más dinero.   

Eso le hace un daño al país, no vamos tener la colaboración de la sociedad civil si las ONG están trabajando al revés en sus propósitos, como el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) que es un órgano de oposición política, no es un órgano de lucha contra la corrupción y decidió que el gobierno y el Partido Nacional son sus enemigos.  

Pero el CNA no es un auditor del Estado 

Es un órgano multisectorial, en el que el Estado tiene la obligación de aportar fondos y tiene algún par de representantes, pero la sociedad civil es la que tiene mayor representación y determina quiénes son sus dirigentes. 

Se les fue a entregar (al CNA) toda la documentación del Tribunal Superior de Cuentas, confirmada, ratificada por miles de millones de lempiras del gobierno de Manuel Zelaya, dijeron que eso no se podía investigar por qué había sido objeto del tratamiento del Acuerdo de Cartagena. 

Es un estado de impunidad absoluta, cuando se robaron más de 10 mil millones de dólares de la reducción de la pobreza; el ''carretillazo'' no se puede investigar, al CNA no le interesa. Hay algunas organizaciones que tienen sesgo político. 

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Foto: Álex Gutiérrez / TED BrandStudio


¿Hay un desgaste en el gobierno de Juan Orlando Hernández?
 

Por supuestos, es que no es cosa que él quiera, es que la ciencia política dice que un presidente no cumple al 100% en ningún país del mundo, cuando está más de dos periodos, eso genera desconfianza, inconformidad, incomprensión y molestia. 

El Partido Nacional tiene tres desgastes de tres gobiernos distintos y eso no se puede evitar; ¿cómo se resolvió?, pues manteniendo unido al partido, la fortaleza de su estructura de base y la plataforma del día de las elecciones, con una evolución en los liderazgos nacionales. 

Los candidatos del partido la mayoría son gente nueva y el 95% de los funcionarios públicos que va nombrar “Tito” Asfura son nuevos, no van a ser los del gobierno de Juan Orlando Hernández y ahí se va aprobar la tesis de que “Papi” es diferente. 

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¿Qué opinión tiene de que Nasralla?
 

Veo en Salvador Nasralla su ingenuidad política, nunca le entendió, él se metió con su ego personal creyendo que el pueblo lo iba amar, que por mucha tontera que dijera toda la gente lo iba a aplaudir, ha demostrado demasiada inconsistencia, es demasiado irreverente con el pueblo hondureño, creo que él tiene problemas mentales muy fuerte, además de personalidad y no acepta no haber cometido errores.

¿Pero argumentó que el Partido Anticorrupción se lo robaron? 

Tiene enormes problemas de personalidad para poder dirigir una institución, porque los partidos no son haciendas personales, son organizaciones políticas, en donde se discute el bien común del gobierno, no es el programa X-0, en donde él hace lo que quiere. 

Nasralla es utilizado por “Mel” nuevamente, él es muy astuto y sabe que Xiomara Castro (candidata presidencial de Libre) tiene perdidas las elecciones y decide aceptar nuevamente a Salvador dentro de Libre, después de que le dijo "ladrón", "asesino" y la candidata le dijo otras cosas groseras. 

Qué le aportó Nasralla a Xiomara, si toda su base está inconforme, el Partido Salvador de Honduras está existiendo sin Salvador, casi en todo el país. 

 Fernando Anduray suma casi cuatro décadas en cargos públicos, muchas de estas en entidades ligadas al sector electoral.

Es así que, entre otros, puestos, fue diputado al Congreso Nacional de 1994 a 1998; director residente de Hondutel, entre 2002 y 2006 y secretario general del Registro Nacional de las Personas entre 2006 y 2012.

Y admite que no ha tenido carrera en el sector privado porque, para los empresarios no es agradable.

Yo nunca he sido un hombre agradable para la empresa privada, por eso no he podido tener más puestos, solo los de funcionarios públicos; mi presencia pública como defensor del partido los obliga a tomarme en cuenta, pero no me dan poder de decisión; porque yo creo que hay que cumplir con la ley.  

Hay que evitar que se sigan haciendo más ricos de una forma ilegal, yo defiendo el sistema democrático del Estado de Derecho; pueden existir ricos honestos, hay gente que genera una actividad privada que les proporciona lucro de una forma ordenada y que trabajan honestamente. 

Ahora hablemos de algunas preguntas personales,¿cómo es usted en el hogar? 

Tengo 20 años de estabilidad en mi vida personal, con mi esposa, Anabely Lozano de Anduray, tenemos cuatro hijos, estamos casados; pero yo tengo 12 hijos, los tuve en otro matrimonio anterior y otros por fuera. 

Soy cristiano, asisto a la iglesia al igual que todos mis hijos, voy al Centro Cristiano Internacional, soy pastor adjunto de educación, mi prioridad es Cristo y mi familia, espero que el resto de mis días están dedicados exclusivamente a Dios.  

Por eso es que tengo una visión un poco diferente a la de otros políticos, incluso nacionalistas, creo que debemos practicar los principios cristianos dentro de cada cosa que hagamos. 

Además, tengo nueve nietos y uno viene en camino. 

¿Tiene algún libro específico dentro de la Biblia que más le guste? 

El libro de Santiago nos habla de la sabiduría espiritual y la del mundo. 

¿Aún sigue dando clase en la universidad? 

No, me jubilé en 2016. 

¿Extraña esa experiencia?  

Al principio sí, pero ahora he disfrutado hacer análisis políticos y jurídicos, he tenido más tiempo de construir una visión más de contexto del país, nunca me defino por una situación en particular, yo siempre estoy analizando a la sociedad hondureña, los partidos políticos, los fenómenos sociales como el narcotráfico, lavado de activos, corrupción y desarrollo del país. 

¿Una película favorita? 

No soy apasionado del cine, pero la película que me gustó mucho fue "La novicia rebelde", en mi juventud me gustó, tenía componentes políticos y de amor.  

¿Es una persona romántica? 

Siempre, por eso tengo 12 hijos. 

¿Algún deporte?

 Fútbol.

¿Equipo de la Liga Nacional?

Olimpia hasta la muerte. 

¿Honduras que representa para usted? 

Es mi vida, es mi patria, es el lugar donde yo valgo, he viajado en muchos países del mundo, por muchos continentes, en ninguno me he sentido seguro como me siento en Honduras. 

Es el lugar que Dios nos dio y debemos cuidarlo y protegerlo, de tal forma que yo tengo mis convicciones políticas bien definidas. 

¿Qué valores le enseña usted a sus hijos? 

Honrar a Dios sobre todas las cosas, el principio del amor cristiano, hay que ser caritativos, hay que compartir y ayudar a los necesitados y respetar a las personas. Nadie es más que nadie y todos nos vamos a necesitar algún día.  

De tal forma que debe prepararse tanto espiritualmente como académicamente, el hondureño que no sirve, no sirve para sí mismo. 

Creo que debemos tener alta autoestima, pero con valores morales, éticos y espirituales. No me gusta la música estridente y del mundo, detesto las novelas de narcotraficantes y las que degeneran la dignidad humana. 

No me gustan las películas donde salen hombres y mujeres besándose, donde ponen a niños a que seleccionen si quieren ser mujer o hombre, a mi parece que va contra todo principio de la creación que están en la Biblia, creo que hay que fortalecer la calidad humana.  

El tema de la pureza, la calidad y el amor para los demás y para Dios es fundamental y delicado, por eso yo, en política, yo no odio a nadie.  Yo miro los otros votos de partidos políticos como el derecho que tiene a expresarse, pero nadie tiene el derecho a destruir la calidad humana.