A menos de tres semanas de las elecciones generales del 28 de noviembre en Honduras, la sociedad hondureña se pregunta si es viable en estos momentos un pacto de paz electoral en el país.

En ese sentido, analistas políticos consultados por tunota.com son del criterio que, si realmente se quiere evitar una crisis sociopolítica igual o peor a la de 2017, tendrá que haber un mayor esfuerzo de los actores políticos.

Cabe mencionar que el informe sobre Conflictividad y Violencia Política de las elecciones generales de 2017 del Instituto Universitario en Democracia, Paz y Seguridad (IUDPAS), señaló que posterior a la contienda electoral de ese año, la conflictividad y violencia política aumentó debido a la desconfianza de la ciudadanía en los resultados electorales.

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Dicho fenómeno en Honduras registrado antes, durante o después de las elecciones primarias y generales de 2017 sumó el total de 50 víctimas mortales. De los 18 departamentos del país, 10 resultaron afectados.

La crisis fue alimentada por la desconfianza en los resultados, hecho que motivó a la ciudadanía y los militantes a salir a las calles a manifestarse a través de movilizaciones y tomas de carreteras.

También se observaron daños a la propiedad pública y privada, y saqueos, que provocaron confrontaciones con las fuerzas de seguridad.

En aquel momento, varios sectores de la sociedad propusieron establecer un diálogo y consenso para resolver la crisis electoral; garantizar la gobernabilidad en el país y posteriormente, resolver problemas estructurales como la debilitada institucionalidad.

Si se conoce los daños que produce el conflicto electoral ¿por qué no se ha podido prevenir o controlar en Honduras?

A criterio del exfiscal de la República, Edmundo Orellana, es evidente que en la actualidad se han transgredido las reglas más básicas del respeto en el proceso electoral.

Ante la propuesta del Consejo Nacional Electoral (CNE) y diversos sectores de la sociedad civil sobre la importancia de un pacto paz electoral, Orellana considera que este es un medio para eludir el cumplimiento del deber por parte del máximo organismo electoral del país.

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“Lo que debe hacer el CNE, en lugar de estar con esos pactos de paz, es sancionar a los responsables. Los pactos de paz no se respetan en Honduras, ya se irrespetó la ley y no creo que vayan a respetar un pacto”, dijo a tunota.com el exfiscal de la República.

Seguidamente, afirmó que en la actualidad el mayor responsable de que se genere este tipo de violencia política es el CNE; al no querer o no poder aplicar la ley, lo que significa sancionar a los responsables de las campañas de odio.

“Los partidos políticos nunca van a respetar la ley, la política en campaña electoral es una guerra; debe entenderse, en este caso van a continuar haciendo esas barbaridades si el CNE no lo sanciona”, sostuvo Orellana.

El también ex precandidato presidencial, afirmó que al sancionar a un partido o candidato a cargo de elección popular que fomente este tipo de acciones; los demás dejaría de seguir con esas campañas de odio.

Una necesidad el pacto de paz electoral

Por su parte, el director de Gobernanza y Transparencia de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Lester Ramírez, indicó que más que viable, es necesario tener un pacto o acuerdo en estos momentos entre los partidos políticos, por las campañas de odio y polarización que hay en la sociedad hondureña.

“Esto realmente preocupa, porque realmente divide a los hondureños. Queremos tener elecciones en paz, ordenadas y transparentes. Además, es importante acuerpar la institucionalidad electoral”, expresó Ramírez.

Al mismo tiempo, añadió que al final este tipo de problemas electorales terminan en las calles, con violencia, muertes, violaciones a derechos humanos y afecta a la economía del país.

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“Esperemos que los partidos políticos puedan suscribir este acuerdo de paz, porque a la hora de la hora nos afecta a todos. Los tiempos cambian y necesitamos que el nuevo Gobierno tenga estabilidad a partir de 2022; para llevar al país hacia un nuevo rumbo”, puntualizó Ramírez.

Honduras realizará elecciones generales el próximo 28 de noviembre, donde 5.1 millones de ciudadanos están habilitados para ejercer el sufragio.

Durante ese proceso electoral los hondureños elegirán al próximo presidente o presidenta de Honduras y tres designados presidenciales.

Asimismo, alcaldes de los 298 municipios del país y sus respectivas formulas. De igual forma, serán electos 128 diputados al Congreso Nacional y sus suplentes.