Las autoridades policiales ecuatorianas explicaron en un comunicado que el imputado, de 57 años, cometía los abusos después de lograr "una relación de afectividad para captar niñas y adolescentes desde los seis hasta los 15 años en distintas comunidades "de bajos recursos".
El "sacerdote" se acercaba a las niñas bajo engaños y las trasladaba desde Quito a diferentes ciudades de Ecuador y a Perú, donde las obligaba a realizar "actos de naturaleza sexual".
Las investigaciones contra el falso religioso datan desde 2011 cuando se presentaron tres denuncias en su contra por violación de menores en comunidades alejadas y empobrecidas de Ecuador.
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En 2018 las autoridades ecuatorianas recibieron otra denuncia contra el individuo por violación de una menor de 11 años, quien quedó embarazada.
Para ocultar ese delito, el hombre falsificó documentos e hizo pasar a su víctima como su hija para llevarla a Perú, donde la menor dio a luz en un hospital público.
El falso cura dijo a los doctores y autoridades que su "hija" había quedado embarazada producto de una violación por parte de un adolescente.
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No obstante, el hombre huyó cuando en el hospital le pidieron documentos para sustentar que la niña era su hija y así poderla sacar de sanatorio.
Investigaciones
El caso siguió abierto y en 2022 las autoridades de Ecuador y Perú iniciaron operaciones para dar con su paradero y captura.
Tras buscarlo por varios días, el sujeto fue localizado ejerciendo como sacerdote en Lima, Perú, y luego salió a Ecuador.
Las autoridades trasladaron a Jesús E. E. de la provincia El Oro a Quito, Ecuador, donde enfrenta la justicia por delitos de violación sexual.
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