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La ecoterapia, conocida también como la terapia verde o centrada en el medioambiente no es un método novedoso, pero sí muy utilizado en los últimos días.
Sobre todo, es implementado por las personas que sufren altos índices de estrés y ansiedad, siendo una salida factible y ecológica.
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Vivir en la urbanización puede limitar a las personas de respirar un aire puro, libre de contaminantes ambientales, y con el afán de las actividades diarias se olvida de los beneficios que puede dejar la naturaleza a la salud mental y física.
Responsabilidad humana
Al practicar la ecoterapia se obtienen beneficios directos de la naturaleza al cuerpo humano, pero, también se debe ser conscientes de que hay un grado de responsabilidad con el medioambiente.
Con esta técnica se promueve la conservación y evita la destrucción ambiental, para que los recursos ambientales sean siempre una fuente de vida y un proveedor de salud integral.
Los portales de cuidado ambiental destacan que la ecoterapia es una oportunidad de conexión genuina entre el humano y los ecosistemas, por lo que surgirá un amor genuino por el entorno verde, que motivará a este a conservarlo.
¡Esto es positivo! Pues, si todas las personas se acercaran a un bosque, a una laguna o a un grupo de animales y los acariciara podría ser consciente de la importancia de la conservación, pues no se debe olvidar que el planeta es un hogar prestado y no le pertenece al ser humano, mismo que ha tomado atribuciones lamentables para su destrucción.
Desde la psicología se enumeran múltiples beneficios de la ecoterapia, según expertos en el área, por lo que sí es una recomendación de terapia saludable.
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Beneficios
1.Reducción de los pensamientos negativos
La naturaleza impacta de forma positiva en la mente, permitiendo al ser humano reiniciar su mente y vaciarla de los pensamientos obsesivos y negativos.
De acuerdo con un estudio de la Universidad de Stanford, caminar 90 minutos al día por un entorno natural disminuye las rumiaciones y los pensamientos negativos. Además, reduce la actividad neuronal en la corteza prefrontal.
2.Promueve la creatividad
Según un estudio hecho por Ruth Ann Atchley y David L. Strayer, el forest bathing (una técnica de ecoterapia) aumenta la creatividad hasta en un 50% en la resolución de problemas complejos, es decir, mantenerse en contacto con un entorno natural nos permite enfocar la atención por completo en el problema.
3.Estimula la capacidad intelectual
Correr en el bosque, no solo quema entre 400 y 700 calorías por hora, sino que también ayuda a mantener las células sanas y nutridas.
En un estudio realizado en la Universidad de Columbia se descubrió que ejercitarse en la naturaleza mejora la memoria y la habilidad cognitiva, aumentando el volumen del hipocampo.
4.Dominar el trastorno por déficit de atención
También, según un estudio realizado por los investigadores Frances E. Kuo y Andrea Faber Taylor, la exposición a actividades al aire libre disminuye significativamente los síntomas de TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad).
Datos
Según expertos, también hay beneficios físicos. Un estudio indicó que caminar un tiempo por el bosque o descansar en él reducía el cortisol (hormona del estrés), presión arterial y frecuencia cardiaca.
También, hay estudios que se refieren a que hay una mejoría en el ciclo del sueño.
