Elegir las tonalidades de las pinturas para emplear en casa es un tema muy importante, pues aparte de ser un acto que requiere de una inversión económica, también es determinante para la decoración y el estilo de un hogar. Una de las gamas que recomiendan elegir son los tonos grises, pero… ¿Por qué?

Existen algunos beneficios al pintar las paredes del hogar en tonalidad de grises, señaló a tunota la diseñadora de interiores, Keyla López.

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La primera es porque dan un reflejo de luz, crean un ambiente fresco en el hogar, ya que son colores neutros y hace que la casa se mire mucho más amplia, indicó.

También, al pintar con tonos grises se puede dar una ilusión de que el espacio pequeño se transforme en uno más amplio.

En caso de que sea un espacio pequeño, luego de pintar en tonos grises lo recomendado es no llenar de elementos el lugar, pues estaría restando lo que se ha logrado.

Otra ventaja de los tonos grises es que da frescura. “Crean una sensación de frescura y tranquilidad lo que hace que el cuerpo se relaje más”, explicó López.

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Aconsejó que antes de comenzar a pintar, ya sea en tonalidad de grises o cualquier otro color, lo más aconsejable es utilizar un primer o sellador, que lo que hace es neutralizar el color que hay de fondo y crear una base para aplicar el nuevo color.

“Al utilizar este primer o sellador la cantidad de pintura nueva que vamos a colocar, en este caso la escala de tonos grises, hace que sean menos pasadas de pintura, ya sea con brocha o con rodo o con vaquita y esto hace que gastemos menos dinero en el nuevo color”, concluyó.

Este es un artículo de la versión impresa de tunota. Lea más noticias relacionadas.

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