Cuando se siente alguna vibración en el volante, uno de los motivos más comunes es el problema en las llantas, pues son el único punto de contacto entre este y el suelo y cualquier anomalía afecta directamente la conducción.

Si las llantas están desgastadas de forma irregular o se hizo una mala elección de ellas, será notoria una vibración rítmica.

El fenómeno aumentará conforme lo haga la velocidad.

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Otra de las causas de la vibración del volante es un desbalance, ya sea entre las llantas de un mismo eje o entre los ejes delanteros y traseros.

También,  los empaques pueden ser una de las razones, pues estos sirven para reducir el desgaste entre las piezas de metal que existen en el vehículo. Cuando hay un deterioro considerable en los empaques presentes en la dirección se puede producir una vibración en el volante.

¿Qué hacer?

Una de las soluciones es llevarlo a un taller mecánico para realizar la alineación y balanceo. Si por otro lado, la vibración del carro solo aparece cuando se frena, el problema puede deberse a los discos de los frenos.

Debido al desgaste natural o freno de forma abrupta, los discos pueden doblarse y esto causa una vibración en el volante.

Este problema no puede pasar desapercibido, pues, podría ser mortal, en caso de no ser atendido a tiempo.

Este es un artículo de la versión impresa de tunota. Lea más noticias relacionadas

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