El temible narcotraficante mexicano Joaquín "El Chapo" Guzmán Loera estuvo en Honduras entre 2002 y 2013. Se refugió en Copán, occidente del país, supervisó narcopistas en el atlántico y sobornó a reconocidos políticos

"Sí, sí vino. Vino él y varios enviados", respondió el actual ministro de Seguridad hondureño, Ramón Sabillón, cuando se le consultó en 30/30 de TSi si, en efecto, el excapo del Cártel de Sinaloa visitó tierras hondureñas.

La historia de la relación entre Guzmán Loera y Honduras, según reportes de inteligencia que sirvieron durante su enjuiciamiento en 2019, se remonta a 2001, cuando escapó por primera vez de la Cárcel El Puente Grande, en Jalisco, México.

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Tras ello, el poderoso narcotraficante visitó el país entre tres y cuatro veces, en un período que va de 2002 a 2013. Así, mientras era el criminal más buscado por las autoridades de México, "El Chapo" se refugiaba en haciendas ubicadas en El Espíritu, Copán, y se daba el lujo de cerrar restaurantes en San Pedro Sula, Cortés.

Primer registro

El primer registro de la presencia de Joaquín Guzmán Loera en Honduras data de 2002, cuando se reunió con los Rivera Maradiaga, los líderes del Cártel de Los Cachiros, una estructura criminal que movilizaba cocaína desde Sudamérica, específicamente Venezuela y Colombia, hacia Estados Unidos.

En ese momento, el narcotraficante empezó a traficar cocaína -a través de Honduras-, junto a los Rivera Maradiaga, durante al menos una década. Cuando visitaba Honduras, él mismo se trasladaba a a supervisar las narcopistas en donde operaban sus socios hondureños.

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La sociedad criminal que estableció Guzmán con los Rivera Maradiaga extendió sus operaciones hacia los departamentos de Atlántida, Cortés, Copán, Colón, Gracias a Dios y Olancho.

Relación con los Valle Valle, Ardón Soriano y los Hernández

Sin embargo, fue con los hermanos Miguel Arnulfo y Luis Alonso Valle, los mandamases del Cártel de los Valle Valle, con quienes estableció un vínculo mucho más estrecho y reciente.

Eran ellos quienes le ofrecían refugios en sus haciendas localizadas en El Espíritu, Copán. "El Chapo" era un temible criminal que merodeaba Honduras como amo por su casa. De hecho, un informe de las Fuerzas Armadas, publicado en 2011, cita que Guzmán Loera utilizó a un policía hondureño de alto rango como chofer personal.

En 2012, en la frontera que une a Honduras y Guatemala, un importante cargamento propiedad del Cartel de Sinaloa, que lideraba Guzmán Loera y su socio Ismael "El Mayo" Zambada, fue robado.

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Molesto, "El Chapo" pidió explicaciones a Alexander Ardón "Chande" Soriano, otro temible narcotraficante hondureño que, según la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, fue muy cercano a los hermanos Juan Antonio "Tony" y Juan Orlando Hernández.

Como respuesta al problema, "Tony" sugirió a Ardón que hablara con el entonces presidente de la República, Porfirio Lobo Sosa. En respuesta, Lobo blindó ese punto fronterizo con unos 120 soldados que, lejos de proteger a los ciudadanos, resguardaba los cargamentos de cocaína.

Porfirio Lobo Sosa, presidente de Honduras entre 2010 y 2014, negó la semana pasada -una vez más- los supuestos vínculos con el narcotráfico.

La campaña de JOH

En 2013, "El Chapo" Guzmán, en ese entonces el narcotraficante más buscado en el mundo, viajó hacia Honduras. Allí, en una hacienda de los Valle Valle localizada en El Espíritu, Copán, se reunió con "Tony" Hernández y otros narcos hondureños.

"Tony" Hernández, quien en ese momento era candidato a diputado por el Partido Nacional, le prometió que si su hermano Juan Orlando -entonces presidente del Congreso y candidato a la presidencia de Honduras- llegaba a lo más alto, le garantizaría protección a sus cargamentos de cocaína.

"El Chapo" aceptó y le entregó personalmente 1 millón de dólares a "Tony" para financiar la campaña presidencial de Juan Orlando Hernández, que durante las elecciones generales 2013 le ganó la contienda a la actual presidenta hondureña, Xiomara Castro.

El Chapo le habría entregado un millón a Tony para enviárselo a JOH, según la Fiscalía estadounidense.

Según la acusación de la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York que se presentó en contra de Hernández y que tiene al presidente de Honduras entre 2014 y 2022 al borde la extradición, fue él mismo quien envió a su hermano, Tony -cargado con ametralladoras, a reunirse con "El Chapo" y beneficiarse con el millonario soborno.

En enero de 2014, Hernández fue investido como presidente de Honduras y, durante su discurso presidencial, anunció "medidas fuertes contra los narcotraficantes", cuando en realidad, al menos según los fiscales estadounidenses y la DEA, él era uno de ellos.

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