El secretario de Seguridad de Honduras, Ramón Sabillón, aseguró este martes que no todas las personas que están extorsionando a transportistas y comerciantes son miembros de maras y pandillas, sino que hay también personas que se hacen pasar como integrantes de estructuras a fin de favorecerse de dinero de forma ilícita.
"Hay muchos que se aprovechan de las extorsiones y todo mundo se dice mara, no, no, no, aquí hay mucha gente que se está aprovechando", dijo Sabillón tras ser abordado por la prensa por el delito de la extorsión en Honduras.
El funcionario aseguró que han detectado a muchos jóvenes que están extorsionando por internet "y no son propiamente mareros o miembros de grupos juveniles con conducta irregular. Son otros".
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Sabillón indicó que los criminales han hecho acopio de la extorsión "porque es más fácil, en lugar de estar asaltando a las personas".
El titular de Seguridad dijo que aunque el delito de la extorsión se dejó crecer en el pasado, están tratando de crear una barrera de contención "fuerte, pero confiable y duradera, de procesos creíbles desde el punto de vista científico y técnica jurídica".
Seguido, Sabillón reiteró la disposición del Gobierno de echar a andar próximamente un Plan Integral contra la Extorsión y delitos conexos, pero obvió dar a conocer las medidas que tomarán al respecto.
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"En cualquier momento daremos a conocer las líneas generales", expresó Sabillón al descartar que todas las acciones se vayan a divulgar como parte de la estrategia antiextorsión.
Medidas contra la extorsión
Respecto a la ofensiva antiextorsión, el comisionado de Policía en condición de retiro, Danilo Orellana, dijo a través de La Fuerza Informativa de radio HRN y Hoy Mismo de TSi, que las directrices deben desde la Casa de Gobierno, pero las autoridades policiales deben de pedir las herramientas legales para combatir la extorsión.
Además, Orellana consideró que se deben de dar medidas preventivas, como declarar estados de excepción en algunas zonas de Honduras donde se ha incrementado la extorsión, o donde se ha iniciado este flagelo.
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Tal es el caso del municipio de Lepaterique, Francisco Morazán, que impuso por un mes un toque de queda en horas de la noche luego que grupos organizados tuvieran en zozobra a los comerciantes, pueblo en general y amenazaran al alcalde.
Mientras, en Tegucigalpa, capital de Honduras, los transportistas marchan este martes para pedir al Gobierno medidas para combatir la extorsión.
"Hay que copar también algunos barrios y colonias en Tegucigalpa y San Pedro Sula, y áreas rurales donde se han ido a meter los individuos (extorsionadores)", expresó Orellana.
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También se debe de fortalecer la investigación y poner penas fuertes contra los miembros de estructuras que están afectando a la población con la imposición del "impuesto de guerra", sostuvo el comisionado retirado.
La extorsión está tipificada como delito en el artículo 222 del Código Penal hondureño y establece una pena de tres a nueve años de acuerdo a la gravedad e insistencia del delito.
Pago de extorsión en Honduras
En Honduras se pagan anualmente entre 30 y 50 millones de dólares (entre 735 millones a 1,200 mil millones de lempiras) por concepto de extorsión, según un informe de Global Financial Integrity (GFI).
Algunos comerciantes han denunciado que el pago de la extorsión se hace hasta a tres o cuatro estructuras criminales, siendo estas la Mara Salvatrucha (MS-13) y la pandilla Barrio 18, como dos de las principales.
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