Luego de que el Gobierno anunció el lunes (03.01.2022) que el ajuste del 13 por ciento al costo de la energía eléctrica no tendrá efecto sobre los abonados residenciales y comerciales, la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE) salió al paso y aseguró que las secretarías de Energía y Finanzas deberán "sentarse y verificar si existen fondos para un nuevo subsidio energético".

"Con esa información que hemos proporcionado, ahora ellos deberán sentarse y definir cuál es la cantidad de fondos con que se cuenta para aplicar un nuevo subsidio", explicó a tunota.com el comisionado presidente de la CREE, Leonardo Deras.

El funcionario recordó que "el trabajo de la CREE es emitir, con base en cálculos técnicos, el valor real del costo de la energía eléctrica y supervisar que los abonados reciban un cobro adecuado".

La CREE emitió el lunes (03.01.2022) el pliego tarifario del valor real del costo de la energía eléctrica correspondiente al primer trimestre de 2022 con un ajuste promediado del 13 por ciento.

No obstante, si se suma el 12 por ciento que había sido congelado entre octubre y diciembre de 2021, los incrementos van desde un 25.4 hasta un 35.4 por ciento, dependiendo del sector.

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"Si el Gobierno tiene la capacidad y está en la disposición de aplicar el subsidio, entonces que lo haga. Nosotros solamente nos encargamos de elaborar el cálculo del valor real de la tarifa", dijo el también exgerente de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE).

Exfuncionarios de la estatal eléctrica advierten que el subsidio en la tarifa energética, que según Energía beneficiará entre enero y marzo de 2022 a unas 1.7 millones de personas que consumen menos de 150 kWh mensualmente, le costará a la ENEE unos 1 mil millones de lempiras (40 millones 866 mil 367 dólares).

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'No hay que satanizar el subsidio', pero…

El economista Claudio Salgado comentó a tunota.com que "si el subsidio está focalizado a un sector que lo necesita, no existe mayor problema".

"Sí, afecta las finanzas de la ENEE, pero de todas formas quien asumirá esos costos será el Estado, es decir, nosotros mediante el pago de impuestos. No veo razón para satanizar este asunto", respondió.

Por su parte, el también economista Ismael Zepeda Galo, del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), consideró que, "si bien no hay que satanizar el tema", el subsidio energético es, en realidad, una "mala práctica".

"Es una mala práctica porque el Estado no puede seguir contradiciendo ciertas dinámicas de la economía, en este caso la factura de energía eléctrica", explicó a este medio de comunicación.

Durante los últimos dos trimestres de 2021, el Gobierno de Honduras congeló, a través del Poder Ejecutivo, las tarifas energéticas.

"La cuestión es que el subsidio, si bien favorece a los desprotegidos y a los vulnerables, también genera desigualdades dentro de los sectores a los que sí les tocará asumir el incremento tarifario. Me refiero a la clase media y al sector industrial", subrayó.

De igual modo, indicó que cuando las finanzas de la ENEE y las del Estado no son separadas, sumada la intención del Gobierno de querer asumir ese incremento, "se termina cayendo en un círculo vicioso que deteriora, cada vez más, las finanzas de la estatal eléctrica".

Sumida en una crisis financiera, la ENEE acumuló al término de 2021 una deuda superior a los 80 mil millones de lempiras (3 mil 313 millones de dólares).

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