¿Qué quieres de verdad en tu vida? ¿Qué es ese sueño o ilusión que más resuena para ti? Identificar nuestro sueños y anhelos le da sentido a nuestra vida y nos ayuda a vivir con intención.

Identificar con claridad aquello que realmente es importante para nosotros, nos ayuda no solo a marcar una dirección clara hacia donde vamos a dirigir nuestros esfuerzos, sino también a tomar consciencia sobre sí nuestras acciones actuales nos están acercando o alejando de aquello que realmente queremos lograr.

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Igualmente importante y poderoso es generar “recuerdos futuros”; es decir, “visualizar el futuro”. 

En mis sesiones de coaching, yo invito a mis coachees a que imaginen su futuro y que construyan con su imaginación ese lugar donde desean llegar.

En otras palabras, los animo a que diseñen sin censuras y hasta con un toque de locura ese recuerdo futuro que ilustra y describe eso que desean alcanzar. Este ejercicio no solo tiene un impacto poderoso en nuestra salud física y mental, sino también ayuda a la consecución final de nuestras metas.

¿De qué manera? Cuando el cerebro crea una imagen clara y detallada de eso que la persona más anhela, la corteza prefrontal se irriga con más sangre y se generan pensamientos más claros, solo con imaginarse ese futuro prometedor ya cumplido. Esto sucede porque el cuerpo no distingue entre lo real o lo imaginario; es decir, si en este momento me imagino mordiendo un limón con sal, podría comenzar a segregar más saliva, únicamente con imaginar el sabor ácido del limón.

Por tanto, al visualizar nuestras metas, solo con imaginar que las estamos logrando, experimentaremos una sensación de plenitud. Al mismo tiempo, se incrementará la producción de serotonina y endorfinas, reduciendo los niveles de estrés y aumentando el estado de bienestar.  

De igual manera, cuando visualizamos, el cerebro registra esa información como importante y se pone en estado de alerta, activando el Sistema Reticular Activador Ascendente, el cual conecta las cosas que nos interesan con acontecimientos, personas o cosas que están en nuestro entorno.

Voy a ilustrarlo mejor con un ejemplo. Si un chico está interesado en un chica que tiene una camioneta azul, este chico en su ruta hacia su trabajo identificará con mayor facilidad todas las camionetas azules similares a las de su chica de interés. Esto sucede porque el cerebro ha identificado “carro azul” como información de interés.

Del mismo modo, cuando nosotros le damos direcciones claras a nuestro cerebro sobre lo que queremos lograr, nuestro cerebro estará más atento a identificar las oportunidades que se presenten y estén relacionadas con eso que tanto anhelamos.

En conclusión, tener sueños e ilusiones, tiene un poder transformador que genera bienestar en el presente y la obtención de metas en el futuro.

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